sábado, 18 de junio de 2011

- Con una condición.
- ¿Cuál?
- Que pase lo que pase y pase quien pase por nuestras vidas, tú y yo seguiremos siendo amigos.
A veces las cosas se pintan de color de rosa cuando aún están en pleno proceso de maduración. Las semillas no han terminado de germinar y nos empeñamos en ver los brotes. No. Que en junio todavía no han empezado a quemarse las rosas del calor, ni mucho menos a dorarse el trigo. ¿Verdad que no lo viste esta tarde?
Las cosas surgen así. Natural, como la vida misma. Hablando inglés a ritmo lento, y yo poniendo toda mi atención en cada uno de tus acentos, procurando entender todas y cada una de las palabras mientras mi cabeza trabaja mil por hora para procesar tanta información clave y convertirla en un mensaje en... ¿inglés? No, que yo quiero aprender francés, y hablarte, y que no te enteres de nada de lo que te diga. Que te susurre que "siempre seguiremos juntos, de una u otra forma" y que tú lo sientas sentado en un paraje perdido de la mano de Dios.
Al fin y al cabo, una promesa es una promesa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario